Gran Bretaña y la guerra de Sucesión española

El papel de Gran Bretaña en la guerra de Sucesión española (1701-1714) fue tanto un asunto interno como un asunto de política exterior. La guerra produjo tensiones entre tories y whigs, y solidificó la unión anglo-escocesa en un momento de resurgimiento del jacobinismo. La participación militar inglesa y «británica» en la guerra contra los Borbones en España ayudó a forjar la unión militar anglo-escocesa. También moldeó las actitudes británicas hacia España, evolucionando desde la Leyenda Negra a una reputación de resistencia popular y de campañas difíciles. Militarmente, la guerra terminó en gran parte victoriosa desde una perspectiva británica, pero lo más importante es que el éxito de Gran Bretaña impidió que la guerra de Sucesión española se convirtiera en una guerra de Sucesión británica, dado el apoyo extranjero al jacobinismo.